Suena el timbre de la escuela del turno matutino; 8 y 15 de la mañana la maestra pasa la lista en la clase con su computadora; 8 y 30 horas, la información ya está centralizada y comenzará a ser procesada. El sistema, que parece de países desarrollados, se pondrá a prueba en las escuelas públicas de Uruguay. Los objetivos se pueden resumir en dos: mejorar la información para los planes educativos y mejorar los controles de organismos que pagan prestaciones como el BPS con las asignaciones familiares.
Con los datos que envíen las maestras a través de sus computadoras XO, Primaria sabrá de inmediato el nivel de ausentismo de ese día en todo el territorio, tanto de docentes como de escolares. La primera meta de las autoridades de la educación es conocer en tiempo real determinados datos estadísticos que ayudarán a planificar el trabajo y las políticas educativas. También on line se estará en condiciones de cruzar información con el Ministerio de Salud Pública y con el Banco de Previsión Social, organismo que podrá controlar por esa vía qué padres envían a sus hijos asiduamente a la escuela y por tanto saber si esa familia tiene derecho a cobrar asignación familiar.
Desde hace dos años, durante el gobierno de Tabaré Vázquez, se aumentó fuertemente el número de escolares y liceales que reciben esa prestación con un costo anual para la sociedad que hoy ronda los US$ 173 millones. De esa forma se combatirá una de las principales falencias que se reconocen a los planes sociales, que son los controles que deben aplicarse para que los beneficiarios cumplan con las contrapartidas exigidas.
En el caso de programas instrumentados por el anterior gobierno, se reclamó, a cambio de un salario social o el pago de asignaciones, que los niños concurrieran a la escuela y se sometieran a controles médicos.
El mecanismo ideado ahora por Primaria prevé también enlazar datos con el MSP sobre los niños que no tienen todas las vacunas o no cuentan con carné de salud, documento requerido para inscribirse en la escuela. También se informará a Salud Pública si en alguna localidad del interior hay obstáculos referidos a la atención sanitaria.
Gurí. El Consejo de Educación Primaria pondrá en marcha a fines de abril, en forma piloto, el denominado proyecto Gurí (Gestión Unificadora de Registro e Información), que implicará el envió de datos a través de las laptops Ceibal de las maestras a un centro de cómputos al que sólo tendrá acceso muy poco personal autorizado.
La presidenta de Primaria, Edith Moraes, dijo a El Observador que se usará la tecnología disponible y la conectividad que tienen todas las escuelas para recibir información y tener datos en tiempo real, por ejemplo, sobre la asistencia diaria de los alumnos y a fin de año conocer las listas de promociones y de chicos que deberán repetir el año.
Otro de los objetivos planteados es reducir al máximo el papeleo administrativo de las maestras y directoras que pasarán a trabajar en formato electrónico. “En definitiva, es una simplificación del trabajo” dijo Moraes.
Para este programa, el Consejo de Educación Primaria ya creó dentro del Departamento de Estadística la sección Secretaría Escolar que será donde se recibirá la información on line que aporten los maestros.
El programa Gurí se pondrá a prueba en dos semanas en cuatro escuelas de Montevideo. Una de ellas es de tiempo completo, otra es común, otra es especial y la otra es un jardín de preescolares. El software ya está armado y trabajó en él la agencia estatal para el gobierno electrónico.
Moraes señaló que, una vez evaluado el funcionamiento, el sistema será extendido a todas las escuelas del país.
Seguridad social. El presidente del Banco de Previsión Social, Ernesto Murro, comentó a El Observador que junto a Primaria se “testeará” la marcha del plan piloto que en definitiva servirá para “reforzar la base de datos del BPS” y ajustar los controles. Señaló que los niños son tenidos en cuenta para el pago de asignaciones familiares pero también para su cobertura mutual y las deducciones que se pueden hacer del Impuesto a la Renta (IRPF).
En tanto, el director en representación de los trabajadores en el BPS, Ariel Ferrari, señaló a El Observador “que el cruce de información es vital para mejorar la gestión del Estado”.
Dijo que los controles sobre asistencia a la escuela se habían dejado de hacer en el año 2000, luego se retomaron lentamente y se hacían “una o dos veces al año”y ahora el proyecto Gurí, será clave para “ajustar a derecho el otorgamiento de beneficios”.
En cifras
377.481 escolares estudian en el sistema de educación pública, según datos del Consejo de Primaria.
380.000 fueron las computadoras X0 entregadas a escolares y docentes por el gobierno de Tabaré Vázquez.
23.000 maestras dictan clases en las escuelas públicas.
567.811 niños y adolescentes reciben asignaciones familiares del Banco de Previsión Social, según datos del BPS a febrero de 2010.
$ 496 es el promedio de cada asignación familiar por hijo.
US$ 173.000.000 pagó el BPS por concepto de asignaciones familiares entre enero y diciembre de 2009.
Apoyo del interior
Hace cuatro años el Banco de Previsión Social donó unas 400 computadoras a centros públicos de enseñanza para ayudar a informatizar el manejo de datos y el cruzamiento de información entre organismos del Estado. Fuentes del BPS dijeron a El Observador que desde entonces siempre fue mayor el flujo de información proveniente de centros del interior que de los de Montevideo, donde hubo cierta reticencia de los docentes.
El Observador, 14 de abril de 2010 - Leonardo Luzzi
miércoles, 14 de abril de 2010
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