Mujica busca aprovechar el tiempo de Lula en el gobierno

Es su “viejo amigo”. Lula Da Silva es de quien José Mujica tomó más consejos políticos en su camino a la Presidencia y a quién considera un ejemplo para gobernar. Le recomendó en la campaña electoral que se pusiera traje para ganar la elección y él lo hizo. De hecho, ahora se lo ve siempre de saco. Lula pregona el “dialogar con todos y de todo”, y el presidente uruguayo también lo está practicando al pie de la letra al gobernar en la interna.

Pero la visita oficial que José Mujica inició ayer, y que incluirá un intenso día de trabajo hoy en Brasilia, tiene un fuerte contenido comercial. Mujica quiere aprovechar que a Lula le queda poco tiempo en el gobierno para obtener la mayor cantidad de beneficios posibles fruto de esa relación. El gobierno uruguayo llega a Brasil para escuchar formalmente la oferta realizada por la administración de Lula para cambiar la tecnología elegida para la televisión digital. Además negociará el ingreso de pollos brasileños (algo que los avicultores uruguayos rechazan de plano) a cambio de destrabar la entrada a Brasil de otros productos nacionales como la leche y cereales.

Digital.
Uruguay optó, durante el gobierno de Tabaré Vázquez, por la norma europea para la televisión digital. Fue uno de los pocos países de la región que se inclinó por ese sistema.

Brasil, primero de los latinoamericanos en elegir la norma japonesa, propone grandes inversiones tecnológicas como contrapartida de un cambio en la elección uruguaya.

Pretende que el gobierno de Mujica también elija la norma japonesa y así lograr acuerdos de complementación tecnológica en la fabricación de aparatos conversores de televisión analógica a digital.

La decisión tiene mucho de técnico (porque con una norma se tienen más canales y con otra se prioriza la calidad) pero también de político. Mujica repite una y otra vez que Brasil tiene que liderar en la región y eso se lo volverá a plantear hoy a Lula. Conforme con ese criterio, debería ceder ante un planteo de este tipo.

Como contracara, cambiar de caballo puede ser una mala señal hacia los inversores y sobre todo los europeos.

Eso es algo que al gobierno le preocupa mucho. De hecho, cuando para la asunción de Mujica estuvo en Uruguay el príncipe de Asturias, ambos hablaron del tema. Allí España, en nombre de toda la Unión Europea, agradeció la preferencia uruguaya. Mujica trató el punto con Tabaré Vázquez la semana pasada.

El ministro de Industria, Roberto Kreimerman, considerará formalmente el tema esta mañana con el ministro de las Comunicaciones, Hélio Costa. Además se reunirá con el ministro de Desarrollo y Comercio Exterior, Miguel Jorge, con quien buscará agilizar el comercio bilateral.

El plato fuerte de la jornada será a la tardecita. A las 19 horas Mujica y Lula tienen su reunión privada y allí esperan sellar varios acuerdos. Poco más tarde ambos cenarán juntos.


El Observador, 29 de marzo de 2010 - Gonzalo Ferreira – enviado a Brasilia